2/12/08

Paradojas de nuestros tiempos



Tenemos edificios más altos, pero templos más pequeños; autopistas más anchas, pero puntos de vista más estrechos; gastamos más dinero, y tenemos cada vez menos; compramos más, y disfrutamos menos. 
Tenemos casas más grandes, y familias más pequeñas; cosas más convenientes, pero menos tiempo; más educación, y menos sentido; más conocimiento, y menos juicio; más expertos, y más problemas; más medicinas, y menos bienestar; Tomamos mucho, fumamos mucho, gastamos sin medida, reimos muy poco, manejamos muy rápido, nos enfurecemos demasiado rápido, nos acostamos muy tarde, nos levantamos muy cansados, casi no leemos, vemos demasiada TV, y casi nunca rezamos.

Hemos multiplicado nuestras posesiones, pero reducido nuestros valores; hablamos demasiado, amamos muy poco y mentimos casi todo el tiempo. Hemos aprendido a ganarnos la vida, pero no ha disfrutarla, le hemos sumado años a la vida y no vida a los años.

Hemos ido y vuelto a la luna, pero no podemos cruzar la calle para conocer a un vecino; hemos conquistado el espacio exterior, pero no el interior, hacemos cosas más grandes, pero no mejores; hemos limpiado el aire, pero no al alma; hemos dividido al átomo, pero no a nuestros prejuicios; escribimos mucho, pero aprendemos poco; planeamos todo, pero no conseguimos casi nada.

Hemos aprendido a hacer las cosas más rápido, pero no a tener más paciencia; tenemos ganancias más altas, pero moral más baja; más alimento y menos paz.

Construimos más computadores para guardar más información, para producir más copias que nunca, pero nos comunicamos menos; cada vez tenemos más cantidad y menos calidad.

Esta es la época de la comida rápida y de la digestión lenta; hombres altos, de bajo carácter; profundas ganancias y relaciones superficiales. Esta es la época de la paz mundial, y la guerra doméstica; más tiempo libre y menos diversión; más tipos de comida y menos nutritivas.

Ahora tenemos ingresos conjuntos y más divorcios, casas más bellas, pero más hogares rotos.

Esta es la época de viajes rápidos, pañales desechables, moralidad en decadencia, pasiones de una noche, cuerpos con sobrepeso, pastillas que hacen todo, desde alegrarte, hasta calmarte y matarte.

Esta es la época donde tenemos todo en la exhibición y nada en el inventario.

Esta es lastimosamente la verdad.

13 comentarios:

Natalia dijo...

Verdad no???? es terrible esta modernidad, lastima que uno se olvida que lo mas importante lo llevamos dentro, y es nuestra alma, nuestros sueños, nuestros amores, nuestros recuerdos!!!
te mando un beso muy grande.

tia elsa dijo...

Es asi,tal cual, pero creo que está en cada uno tratar de cambiar esa triste realidad, al menos dentro de nuestro ambito, interesarse por el otro, disfrutar la familia, hacer un culto de los amigos y volver a orar, sin duda, besos y muy lindo post, tía Elsa.

ILUSION dijo...

Hola Desire¡

Muy cierto todo, hay que aprender a valorarse y quererse más y dar mucho amor a nuestras familias y a todos los que nos rodean...

Besitos¡¡

Mariela Torres dijo...

Muchas de estas cosas son verdad, pero bueno, cada uno puede hacer que en su vida no lo sean, o al menos, no lo sean todas.

Besos.

Anónimo dijo...

cuanta verdad tiene este post!
es la primera ves que entro a tu blog y me gusto mucho!
besos

Luis y Mª Jesús dijo...

Publicaba Aristóteles en su blog : "Mi querida Mafalda nos pregunta...
¿No será acaso que ésta vida modernaesta teniendo más de moderna que de vida?".
Es una buena reflexión ¿verdad?
Un beso
María Jesús

Eleanor Rigby dijo...

Asi nos va a pasar siempre mi querida Desiré... el Universo entero esta plagado de paradojas...Lo que está bueno es no dejar de p`reguntarse, asi como citaste a Einstein en tu otro blog.

Un abrazo...

Anónimo dijo...

Es muy cierto amiga, hay cosas que no tienen sentido, que en vez de mejorar lo echa a perder. Excelente post! Besitos!!

Jesi dijo...

Así es
y que mundo le dejamos a nuestros hijos eh!!!
complicado

Beso!

Terly (Juan José Romero Montesino-Espartero) dijo...

Pues sí, mi querida Desiré, ¡Se han perdido tantos valores y los que quedan son tan poco consistentes!...
Un beso.

MARAGENA dijo...

Siempre que paso por aquí me encuentro con una reflexión...
Es cierto, vivimos para afuera, dándole importancia a lo que no la tiene y dejando de lado los valores y los afectos.
De todas maneras pienso que nunca es tarde para revertirlo, depende de uno que la vida no nos pase por encima.
Besote

Analia Veronica dijo...

Cuanta verdad en tus palabras!!!
Ya de todas las cosas lindas nos vamos olvidando, que tristeza que me da.
Besos.

Desire dijo...

Gracias a todos por dejar sus comentarios ellos enriquecen cada post. Un beso

El agua es el simbolo del poder de la mujer, el poder al que ningún hombre, por iluminado o perfecto que sea, puede aspirar.